Entrevista/ Silvia González Cervantes/ Una mujer sensible que quiere servir
| Autor | Guillermo Rivera |
Silvia González Cervantes es originaria de Guanajuato, de una familia de clase media metida en la burocracia estatal que reside en aquella ciudad colonial del Bajío.
De hecho, la candidata del PARM a la Gubernatura del Estado, con 18 años de residencia en Jalisco, adjudica la necesidad de "servir a los demás" a una herencia moral que atribuye a su padre, fallecido hace 10 años.
Recién divorciada, Silvia decide asumir el rol de candidata a la Gubernatura con la anuencia de sus dos hijos que permanentemente la escuchan y bromean durante la charla. Es así como empieza a dar a conocer su perfil de mujer, porque se le insiste que ésta es una conversación en la que la política no es el punto central, sino ella misma.
¿Con quién se casó?
Con Francisco Franco, pero estoy divorciada desde hace dos años.
¿A qué se dedica él?
Es empresario agroquímico.
¿Fue difícil divorciarse?
No lo considero así. Fue un acuerdo luego de una relación de 27 años. Las cosas se dan, somos seres humanos.
¿Pertenecía a un partido antes?
No nunca, yo pertenecía a Mujeres y Punto, una agrupación política nacional.
¿Votó por Fox?
Claro.
¿Por qué de pronto política?
Porque hay muchas cosas de los gobiernos que no me gustan, como la inequidad. Ya participé como candidata al Senado por el PARM en estos últimos comicios.
¿Cómo es como mujer?
Creo que no he terminado mis aspiraciones, siempre estoy buscando qué otra cosa puedo desarrollar, y todo por este Jalisco que está tan golpeado en algunos aspectos. Como mujer siempre he estado creciendo. Soy una mujer sensible, por eso entré en esta competencia y creo que tengo posibilidades.
Pero no hablemos de política, ¿de qué otra cosa podemos hablar?
Pues de la problemática que hay en el estado, del porqué estoy involucrada en las organizaciones civiles...
¿Usted siempre habla de eso?
Hablo del bien de la comunidad, de mejorar sus condiciones, de camas de hospital, de mesabancos para las escuelas, de muchas cosas para apoyar a la gente necesitada.
¿Qué hay detrás de eso, en usted?
Que me disgusta la inequidad, no estoy contra los ricos, simplemente quiero una mejor vida para los pobres. Lo he hecho desde que pertenezco también a los rotarios. Mi hija, cuando tenía 12 años, la ponía a dar clases en el INEA (Instituto Nacional para la Educación de los Adultos), de alfabetización. Sacamos tres generaciones de primaria y dos de secundaria. Mis hijos también se han involucrado en el servicio social. Le puedo platicar de mi trabajo en los...
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