Empresa/ Sólo para gigantes
| Autor | Alberto Barranco Chavarría |
Desplegado el galimatías ante la exigencia de la oposición de mayores recursos presupuestales para atender prioridades en materia de gasto social; ampliar las participaciones de las entidades federativas y apuntar con mayor énfasis al detonante de la inversión pública, y su negativa tajante a gravar con mayor rigor el consumo, se están desempolvando alternativas tributarias que en su momento atajó la presión de las cúpulas empresariales.
Una de ellas, colocada en la mesa por el Partido de la Revolución Democrática, habla de acotar a cero la prerrogativa de consolidación fiscal de los conglomerados empresariales.
La exposición de motivos habla de una recaudación extraordinaria de 145 mil millones de pesos, es decir 25 mil más de los que se alcanzarían de adoptarse a la letra la propuesta del Presidente Vicente Fox de la "Nueva Hacienda Distributiva" y casi cinco tantos de la disminución de ingresos que derivaría de aceptarse la recomendación de la OCDE de bajar de 17 a 13 dólares la expectativa del precio promedio para la Mezcla Mexicana de petróleo para el año próximo.
De acuerdo con el esquema planteado bajo el marco de la Ley del Impuesto sobre la Renta en vigor, las empresas gigantes tienen opción de prorratear, de cara al fisco, las pérdidas de alguna o algunas de sus filiales+ lo que según funcionarios de la Secretaría de Hacienda, pareciera obedecer a una estrategia previa.
Se diría que siempre hay una manzana podrida en el frutero, cuya descomposición contrasta radicalmente con la brillantez y frescura del resto.
Lo cierto es que tras una tórrida batalla del Consejo Coordinador Empresarial, la Secretaría de Hacienda debió doblar las manos+ parcialmente, en su intento de desaparecer la prerrogativa, a cuya vera, según sus propios cálculos, se alcanzaría un incremento en la recaudación de 100 mil millones de pesos.
La posibilidad de consolidar el ramillete de las holding o empresas controladoras se acotó para el ejercicio de 1999 a sólo 60 por ciento de la factura global impositiva, o si lo prefiere se achicó en 40 por ciento, en una medida que llegó paralela a la cancelación de ordenamientos que permitían la deducibilidad inmediata de las inversiones.
El caso es que aún cuando la mitad de las firmas afectadas, entre ellas las de entretenimiento Televisa, Televisión Azteca y Multivisión; las armadoras Ford y Chrysler; el Grupo Azucarero Mexicano, la Corporación Mexicana de Restaurantes, Cinemex o el Grupo Iusa, recurrieron a la...
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