Supera Regina adversidad

AutorJuan Carlos García

Para poder concluir el rodaje de su ópera prima como directora, Regina King tuvo que contener el aliento y confiar en su equipo.

One Night in Miami, cuya premier continental se lleva a cabo este fin de semana en el Festival de Cine Internacional de Toronto (TIFF), comenzó su rodaje en Louisiana en noviembre pasado, y las escenas de respaldo y algunas extra fueron efectuadas en febrero, días antes del brote de Covid-19 en Estados Unidos.

"Ha sido una travesía muy distinta a lo que esperaba; prácticamente terminamos de rodar unos días antes de que comenzara el brote fuerte de Covid-19 en Estados Unidos, y la presentación de la película también ha sido distinta.

"Me he adaptado respecto a las premieres, los estrenos, las conversaciones. Todo ha sido en un plano digital. Me falta escuchar lo que piensa la gente y cómo se siente al final de la función, pero lo primero, y lo más importante, es respetar los protocolos para que todo funcione", dijo King, en videoconferencia desde su hogar.

En este largometraje, de 114 minutos y en el cual la actriz ganadora del Óscar es también productora, la historia gira en torno a un encuentro ficcionalizado, en 1964, entre el activista Malcolm X, el boxeador Muhammad Ali, el cantante Sam Cooke y el atleta Jim Brown.

Cada uno comparte sus propios puntos de vista acerca de condiciones políticas y espirituales, sobre todo porque Cassius Clay se encuentra en la tesitura de cambiar su nombre por el de Muhammad Ali.

"Es una historia de amor, aunque no es una forma tradicional de verlo, que más bien es alterna. Sinceramente, hoy en día ya no sé qué tanto decir de la...

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