Suple ambulantaje la falta de trabajo

AutorVania Citlalli de Dios

La crisis de desempleo que vive el país se ve reflejada en las calles de Guadalajara, donde la falta de trabajo permanente la suple el comercio informal y el ambulantaje.

"Si por ejemplo, no hay trabajo, yo me gano 'la papa' como sea, yo me voy a vender chicles o salgo en los camiones", señala Silverio Rodríguez Barocio, de 23 años de edad, limpiaparabrisas y vendedor de tarjetas de teléfono, periódicos y chicles.

Según cifras de la Secretaría de Promoción Económica, Seproe, de diciembre del 2002 a junio del 2003, en Jalisco 3 mil 993 personas quedaron desempleadas.

"La única probabilidad (de trabajo) para uno son las avenidas o en casa (haciendo el aseo)", asegura Ana Martínez Hernández, vendedora ambulante.

"La mayor parte de las personas que andamos aquí es porque a veces no tenemos un estudio, que en una empresa lo requieren", señala, "lo más fácil es venirse a la calle, para uno tener más rápido el empleo".

La emigración es un resultado de la falta de trabajo en México. A Guadalajara han llegado personas de otros estados del país, con la esperanza de conseguir empleo y mejorar sus condiciones de vida.

Hace nueve días José de la Cruz Antaño decidió salir de Veracruz a "probar suerte" en Guadalajara. "Me vine de mi pueblo, allá trabajaba en el campo", comenta.

El joven de 18 años no logró colocarse en una empresa y ahora vende muñecos de peluche en la glorieta de Niños Héroes y López Mateos.

"Ya busqué (trabajo) pero no he podido entrar, en cualquier empresa dicen que se hace examen y pues no (me contratan)".

El caso de Arce Mujica Carachira es similar. Ella y su familia llegaron a Guadalajara hace una semana.

"Allá en México no hay trabajo", dice, "está más lleno, hay más trabajadores y aquí no".

Arce y cuatro personas más venden en el crucero de Manuel Acuña y López Mateos bolsas para la ropa, que son la novedad en México, asegura la señora.

El empleo eventual en grandes empresas también salió a la calle y más de tres mil personas, según la Seproe, han convertido el trabajo temporal en una entrada de dinero.

Jorge Chacón Cariño, de 19 años de edad, ha laborado en el zoológico, en una refaccionaria y una tienda de Medrano. Hoy está...

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