¿Tiempo de renovar?

AutorJesús Ballesteros

El 16 de enero, el Bayern Munich robó la atención del mundo al anunciar la contratación de Josep Guardiola como su técnico por los siguientes 3 años, a partir de la temporada 2013-14.

Todo parecía color de rosa, pues el actual DT de los bávaros, Jupp Heynckes, aparentemente se retiraría del futbol y estaba "contento" de ceder la estafeta al hombre que ganó todo con el Barcelona.

Pero una semana después el idilio se acabó, cuando Heynckes declaró que el momento de hacer pública la llegada del catalán no fue el adecuado, pues podría distraer a sus jugadores y les venían partidos complicados.

Además, comentó que quería dirigir un año más al Bayern y que hasta le había ofrecido a la directiva quedarse en caso de que no encontraran un relevo adecuado. Incluso mencionó que no estaba aún definido su futuro, o sea que lo del retiro no es una realidad.

Y si con la llegada de Guardiola de alguna manera se desestabilizó el banquillo bávaro, hay otras noticias que podrían crear caos entre los jugadores.

De entrada, el anuncio de que Pep contará con 370 millones de dólares para hacer más competitivo al Bayern es un golpe duro para la plantilla, pues pocos estarán seguros de jugar la próxima temporada sabiendo que el nuevo estratega podría traer una buena cantidad de refuerzos que cambiarían la base del club.

Lo curioso es que los bávaros tienen estrellas en prácticamente todas las líneas, están robando en la Bundesliga, jugarán Cuartos de Final en la Copa de Alemania y son favoritos en su duelo ante el Arsenal en Octavos de Champions, torneo en el que, por cierto, son los actuales subcampeones, así que no parecen ser un cuadro que necesite una gran cantidad de refuerzos.

Mucho se ha especulado sobre los hombres que podrían llegar con Pep: el defensa Íñigo Martínez, los volantes Isco Alarcón e Iker Muniaín, y los delanteros Radamel Falcao, Luis Suárez y Robert Lewandowski -quien incluso se dice que ya está firmado- son las opciones más mencionadas.

Ante estas circunstancias, el futuro del Bayern es incierto. Es una incógnita si los jugadores seguirán motivados y tratarán de despedir a Heynckes con el título de la Champions, o si las posibles llegadas de refuerzos terminen por desestabilizar al grupo.

Lo cierto es que la llegada de Guardiola al club alemán podría tener efectos negativos antes de que el técnico se siente por primera vez en el banquillo.

Así no ha sido Pep

A pesar de que la directiva del Bayern Munich ha puesto 370 millones de dólares a la...

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