AL TIRO / Avances tambaleantes

AutorPaco Navarrete

Estas son unas noticias tomadas de las ediciones de MURAL de la semana pasada, donde la desmemoria da paso a la franca ignorancia:

  1. - El exAlcalde de Puerto Vallarta y actual diputado local de Jalisco, Ramón Guerrero, mejor conocido como "El Mochilas", viajó a su ex feudo para declarar, con todas sus letras, que no debería permitirse el servicio de Uber -y otros similares- en el destino turístico, por ser "competencia desleal" para los taxistas y atentar contra sus fuentes de trabajo. Qué valiente.

    Peeero... el señor diputado olvida que en la Legislatura que aún integra se plantearon las reglas... para que operaran servicios como Uber de manera legal. Así, no tuvo empacho en regresar al puerto para comerse el zapato, con tal de empezar a quedar bien con los poderes fácticos... para ir preparando su regreso a la Alcaldía. Qué chafa.

  2. - El Ayuntamiento de Zapopan anunció un acomodo en los camellones de Avenida Universidad, en la zona más "nice" del Municipio: el arreglo correrá en parte a cargo de los vecinos y ahora incluirá grava y madera triturada en el piso de los camellones. Pa' pronto, otros vecinos iracundos y algunos ecologistas enardecidos denunciaron el "ecocidio", pues, argumentaron, al quitar el césped crecerán las temidas "islas de calor".

    Peeero... igual de rápido llegó la respuesta, tanto del Cabildo como de las asociaciones de colonos: que la grava es para conservar la humedad del piso, y el material orgánico enriquecerá el suelo.

    Poco después la protesta se desvaneció como humo.

    Agrego una pregunta a los señores ecologistas y camaradas expertos en el arte de la queja: ¿qué no saben que el césped es todo, menos "ecológico"? Consume más agua que un borracho en cruda, tanta que es lo primero que prohíben regar en épocas de sequía. Qué perdidos...

  3. - Pero de mayor importancia, y más preocupante, es que universitarios y empresarios agrupados en la Coparmex hayan denunciado hace tiempo una movida del Gobierno del Estado bastante sospechosa: la contratación de un sistema de espionaje telefónico y de redes sociales.

    Dicho programa fue adquirido a una empresa especializada en eso: espionaje, aunque en la Fiscalía estatal defienden que su uso es para atacar el secuestro y la extorsión... aunque no revelan nada de su uso, objetivos o resultados.

    De hecho, así cierra la nota del sábado 10: "desde el 2014 el Ejecutivo apenas hizo dos solicitudes a jueces para intervenir comunicaciones".

    Dos solicitudes en tres años...

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