Tres años sin Mafer
| Autor | MURAL / STAFF |
"Así me tenga que enfrentar al mismísimo diablo, lo haré para recuperar a mi hija".
Esa es la postura de Vanessa Claudia Amador, mamá de María Fernanda Azpeitia Amador quien desapareció el 27 de agosto del 2016 y desde entonces no ha parado de buscarla.
Y a pesar de que las autoridades, sobre todo en esta nueva Administración, han hecho muy poco para avanzar en su búsqueda, y la pareja de "Mafer", el principal sospechoso, siga desaparecido, ella no se va a detener.
Hace poco más de tres años, Mafer desapareció después de salir un viernes a tomar un café con su cuñada Yaneth.
Para no preocuparse, la joven le pidió a su mamá que le cuidara a la bebé y se mantuvo en comunicación constante con ella, al grado que por la noche le avisó que se quedaría a dormir con su cuñada para evitar riesgos.
Al día siguiente Mafer le avisó que ya iba de regreso, pero le comentó que su pareja, Amadeo Gutiérrez, también conocido como "El Zorro", había llegado y la estaba molestando.
"Aquí está el 'Zorro' y dice que quemó la casa", le dijo angustiada a su mamá por teléfono.
La joven ya tenía problemas con su pareja y decidió separarse, algo que, de acuerdo con Vanesa pudo causarle molestia a Gutiérrez.
"Le dije, mira, ya vente, y si quieres cuando llegues vamos a ver tu casa. Pero en eso el 'Zorro' le pregunta con quién está hablando, se escucha perfectamente que le arrebata el teléfono y a partir de ahí no supe nada de ella", relató Amador.
Ese fin de semana fue gris para la familia de Mafer, lleno de angustia y desesperación por no saber dónde estaba.
El "Zorro" también se mostró preocupado y se ofreció a acompañar a los padres a interponer una denuncia por su desaparición.
Durante el camino, de acuerdo con Vanessa, El Zorro se notaba nervioso, se fumó una cajetilla de cigarros, el rostro lo tenía rojo y se agarraba mucho las manos.
Después de rendir sus declaraciones en el Centro de Justicia para las Mujeres, el joven se ofreció a imprimir una fotografía de Mafer, salió de la Fiscalía y nunca más lo volvieron a ver.
"Se fue, se peló y a partir de ahí no supimos nada. Trataron de buscarlo a él pero después dijo que era menor de edad y no podía declarar nada", relató Vanessa.
La siguiente semana, la Fiscalía pidió a los familiares que se presentaran en el domicilio de la pareja para catear la casa.
Al entrar, Vanessa no vio nada fuera de lugar más que un cortinero caído, pero al subir a la segunda planta confirmó lo que Mafer le había dicho: la casa estaba...
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