Tropiezos que hacen crecer

AutorGabriela Villegas

Recibir un castigo por olvidar la tarea, fallar un gol en la clase de educación física o no ser seleccionado en el elenco del teatro escolar. A más de un padre de familia se le encoje el corazón con sólo pensar que su hija o hijo pueden verse afectados por una situación de este tipo.

Pero, papás y mamás: ¡Los fracasos escolares son necesarios! Así lo afirman especialistas en educación, familia y psicología.

Hipohijos es como llama la escritora catalana Eva Millet a las niñas y niños que no sufren y ven que la solución a sus problemas la tienen sus padres. Otra alerta envían los psicólogos estadounidenses William Stixrud y Ned Johnson en su libro "The Self-Driven Child de Penguin Random House".

Los hipohijos o niños de cristal también abundan en los pasillos escolares de colegios, según la percepción de los especialistas Jesús Amaya, psicopedagogo, y Josefina Cruz, psicóloga infantil.

Ellos explican el por qué es necesario que los menores, en su maduración, tengan tropiezos y fracasos.

LA TENDENCIA: LOS PADRES HELICÓPTERO

El alumno va dormido en el auto, despierta cuando llega a la puerta de la escuela y papá o mamá le cuelgan la mochila. En el descanso recibe su lunch caliente a través de la malla ciclónica. Y cuando está en casa y olvidó apuntar la tarea, mamá recurre a su grupo de WhatsApp.

¿Qué tienen de tarea para mañana?, pregunta.

Y a los 10 segundos, llega la fotografía de una hoja con la tarea apuntada.

Así son los padres helicóptero. Este concepto que surge por pedagogos de Estados Unidos se refiere al padre o madre que giran sobre y alrededor de sus hijos para evitar que tengan un fracaso, platica Amaya, autor del libro "Padres Obedientes, Hijos Tiranos".

"Se ve una tendencia de los padres de familia a buscar evitar que sus hijos vivan pequeñas carencias, fracasos o adversidades. Y una de las razones de esto es que los papás o adultos vivimos elementos o situaciones donde no estaba papá o mamá cuidándonos o defendiéndonos", complementa Amaya.

"Es un fenómeno global, no es que sea propio de una cultura o sociedad. Se da en todos los niveles y estrato social".

Esta sobreprotección del menor, más en las labores académicas, trae a corto plazo problemas de aprendizaje, comenta Josefina Cruz.

"Nos damos cuenta que los papás, a veces, son los que hacen las tareas. Por lo tanto, los niños no tienen una buena visión psicomotora, una buena caligrafía, una maduración, porque los papás apoyan mucho en este aspecto a los niños", afirma.

Los...

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