¿Le falta el aire?
| Autor | Georgina Montalvo |
Falta de aire, desmayos y fatiga para realizar alguna actividad física, aunque leve, pueden enumerarse entre los síntomas de enfermedades del corazón; sin embargo, también lo son de la hipertensión arterial pulmonar.
Esa es la razón por la que el diagnóstico de esta enfermedad es complicado, pues ante esos síntomas los médicos generalmente piensan que el mal está en el corazón o que se trata de asma, explica Tomás Pulido Zamudio, médico adscrito al Departamento de Cardioneumología del Instituto Nacional de Cardiología.
Y aunque el corazón sí está relacionado con esta enfermedad, el verdadero problema está en los pulmones, pues la afección se presenta cuando aumenta la presión en las arterias de esos órganos.
"Los vasos sanguíneos que transportan la sangre con poco oxígeno desde el corazón hasta los pulmones, se endurecen y se estrechan, por lo que el corazón debe hacer un mayor esfuerzo para bombear sangre", explica en su página web el Instituto Nacional del Corazón, los Pulmones y la Sangre de Estados Unidos.
Conforme pasa el tiempo, el corazón se debilita y no puede cumplir su función de manera efectiva y, entonces sí, puede desarrollarse una insuficiencia cardiaca.
Cómo identificarla
Una radiografía de tórax es un elemento que puede revelar si el corazón o la arteria pulmonar están crecidos, si es así, se puede realizar un ultrasonido del corazón (electrocardiograma) para medir de manera indirecta la presión arterial de los pulmones.
Si se vuelven a encontrar señales de que sí podría tratarse de hipertensión arterial pulmonar, los especialistas pueden considerar realizar un cateterismo en la parte derecha del corazón, con el cual se mide directamente la presión en las arterias pulmonares, indica Pulido Zamudio.
Tomando como referencia datos de Estados Unidos, se calcula que en México existen alrededor de 5 mil enfermos, pero sólo 500 han sido diagnosticados.
La mayoría de las afectadas son mujeres que se encuentran en su tercera o cuarta década de vida, aunque también la pueden presentar niños y adultos mayores.
Sólo entre 6 y 10 por ciento de los casos de hipertensión arterial pulmonar pueden tener origen hereditario, el resto puede ser resultado de alguna enfermedad congénita del corazón, padecimientos propios de los pulmones o a la formación de coágulos de sangre en las arterias pulmonares, señala la Asociación Hipertensión Pulmonaria en su página web.
También puede estar asociada con enfermedades como Lupus, VIH o Esclerodermia o...
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