Tiene Zara Phillips discreta boda real

MURAL / Staff

EDIMBURGO.- Su enlace no fue visto por millones de personas en el mundo ni captó la masiva atención mediática de la boda de su primo, el Príncipe Guillermo. Pero Zara Phillips lucía tan o más feliz al convertirse en esposa del jugador de rugby Mark Tindall la tarde de ayer.

La nieta mayor de la Reina Isabel de Inglaterra contó, eso sí, con la presencia de la familia real británica: el Príncipe Carlos y su esposa Camilla, los duques de Cambridge, el Príncipe Enrique, el Príncipe Andrés, las princesas Beatriz y Eugenia y el Duque de Edimburgo.

Este desfile de miembros de la realeza atrajo a cientos de curiosos, algunos de los cuales hicieron guardia desde las 5:00 horas locales para ver sobre todo a Guillermo y Catalina, quienes fueron los más aplaudidos, y a las principales estrellas del rugby del país.

Los vítores crecieron con la llegada de la limusina de la novia, a las 15:00 horas, a la pequeña iglesia de Canongate Kirk, bajo el sonido de las tradicionales gaitas. Tomada del brazo de su padre, Mark Phillips, se dirigió al interior del templo.

Antes de que las puertas se cerrasen, los presentes pudieron apreciar el ajuar nupcial color marfil y la Tiara Serpenteante que coronaba la cabeza de la que durante mucho tiempo fue considerada la más rebelde de la familia real (durante su adolescencia, osó llevar un piercing).

El novio vestía un elegante chaqué, rompiendo los pronósticos de aquellos que habían apostado a que llevaría un "kilt"...

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